La Orden de Malta en Cuba

La Orden de Malta ha estado presente en Cuba desde los tiempos de la Capitanía General de Cuba, cuando la Isla formaba parte de los territorios ultramarinos de España.

Capitanes Generales pertenecientes a la Orden de Malta tuvieron posiciones de mando sobre la Isla desde finales del siglo XVII hasta finales del siglo XIX. Después de la independencia de Cuba, la Orden de Malta retomó sus esfuerzos para conseguir un acercamiento diplomático hacia las autoridades de la Isla durante los años de la Segunda Guerra Mundial. Éstos culminaron en 1949 con el nombramiento de un delegado especial, D. Francisco Javier de Santa Cruz y Mallén, Conde de San Juan de Jaruco, al que se le encomendó la misión de conseguir el reconocimiento de la Orden de Malta por parte de la República de Cuba.

En 1952 se creó la Asociación Cubana de la Orden de Malta. Alberto de Carricarte y Velázquez, el primer presidente de la Asociación Cubana, fue nombrado Delegado oficial ante el Gobierno cubano. El reconocimiento mutuo entre Cuba y la Orden de Malta se consiguió en 1959 y las relaciones bilaterales fueron formalizadas en abril de 1960 con el intercambio de embajadores. Don José Ruiz Velasco, Embajador de Cuba ante la Santa Sede, se convirtió en el primer embajador de la República de Cuba acreditado ante la Soberana Orden de Malta en Roma.

En los años siguientes, la Orden de Malta desarrolló numerosos proyectos humanitarios en la Isla de Cuba. En la década de 1990, la asistencia provista por la Orden de Malta aumentó con la creación de un cuerpo especial, la “Cuban Task Force”, por parte de la Asociación Federal de la Orden de Malta en Estados Unidos. A través de este cuerpo se enviaron a Cuba cientos de toneladas de comida, medicinas y equipamiento médico hasta el principio de la década de los 2000. La ayuda humanitaria fue dirigida por la Iglesia Católica en Cuba y por Cáritas Cuba.

En 1998, tras la visita a Cuba del Papa Juan Pablo II, tuvo lugar una visita de estado de la Orden de Malta a Cuba. El entonces Gran Maestre de la Orden, Frey Andrew Bertie, el Gran Canciller y el Gran Hospitalario fueron recibidos por el Presidente Fidel Castro y de Ministros y las más altas autoridades de la Isla.

Durante los más de 60 años de relaciones diplomáticas bilaterales entre la República de Cuba y la Soberana Orden de Malta, las relaciones siempre han transcurrido de manera práctica y efectiva. La Soberana Orden de Malta mantiene sus programas de cooperación a través de la Embajada de la Orden en La Habana, mientras que la Asociación Cubana de la Orden contribuye con programas de asistencia social, principalmente en colaboración con la Iglesia Católica de la Isla, y con atención especial a programas en beneficio de los ancianos de Cuba.

Para proyectos y actividades de la Orden de Malta en Cuba:

https://ordendemaltacuba.org/ (Asociación Cubana de la Orden de Malta)